Juan Carlos Vega no fotografía Brasilia como un lugar, sino como un estado del alma. Una ciudad que, en sus manos, se convierte en arte en movimiento.
Juan Carlos Vega: una mirada que emociona
Juan Carlos Vega, nacido en Oviedo, es uno de los fotógrafos españoles de mayor proyección internacional. A través de su lente, ha sabido capturar no solo escenas, sino sentimientos: la esencia de las emociones humanas y el movimiento como expresión artística. Su lenguaje visual, depurado y poético, lo ha consolidado como una figura destacada de la fotografía contemporánea. Brasilia, ciudad que ha visitado en nueve ocasiones, se convirtió con el tiempo en una obsesión creativa, una musa moderna que ha inspirado este proyecto artístico.
Brasilia 65: visiones de un sueño geométrico
La exposición “Brasilia 65: visiones de un sueño geométrico” se inauguró el pasado 8 de julio en la Fundación Pons, en Madrid, con el apoyo de la Embajada de Brasil y del Instituto Guimarães Rosa. La muestra es un homenaje a los 65 años de la capital brasileña, a través de un recorrido en blanco y negro que reinterpreta sus espacios más emblemáticos.
Un sueño urbano que se convirtió en arte
En sus fotografías, Vega rinde tributo al legado del arquitecto Oscar Niemeyer, al diseño urbanístico de Lucio Costa y al paisajismo de Burle Marx, pilares fundamentales en la creación de Brasilia. Pero el artista no se limita a retratar edificios: propone un diálogo entre la arquitectura y el cuerpo humano a través de la danza, en colaboración con el Grupo de Bailarines de Brasilia. Así, la figura humana se convierte en una silueta etérea que habita y se funde con el espacio, creando una narrativa visual donde forma, emoción y movimiento conviven.
Una exposición sensorial e inclusiva
Uno de los aspectos más innovadores de la exposición es su apuesta por la accesibilidad. Las obras pueden ser exploradas también por personas con discapacidad visual gracias a la incorporación de paneles en braille y fotografías en relieve. Esta dimensión táctil transforma la experiencia artística en un acto sensorial, donde el arte se convierte en un espacio compartido y abierto a todos.
Alexandra y el sillón Ibiza: diseño, imagen y emoción
La relación de Juan Carlos Vega con Alexandra va más allá de lo profesional. Amigo personal de Johnny Ventura y María José Guinot, ha colaborado con la firma en distintos proyectos creativos a lo largo de los años. En esta ocasión, la colaboración adquiere una nueva forma a través del sillón Ibiza, diseñado por Jacobo Ventura.
Este encuentro entre fotografía y diseño pone de manifiesto cómo el arte puede tender puentes entre disciplinas y sensibilidades. La mirada de Juan Carlos Vega, capaz de captar la belleza en movimiento y elevarla a expresión poética, se une al saber hacer de Alexandra, cuya artesanía y atención minuciosa al detalle dan forma tangible a las emociones. Juntos, construyen un lenguaje compartido donde la imagen y el objeto dialogan, creando piezas que trascienden lo funcional para convertirse en arte habitable.
Para esta edición especial, una de las imágenes más icónicas de la exposición ha sido impresa en tela y utilizada como tapizado del sillón. El resultado es una pieza única que fusiona fotografía, diseño y arte contemporáneo, ofreciendo al espectador una manera distinta de vivir la imagen: no solo verla, sino habitarla.
